¿Qué son para el autor?
Se trata de una solución para trabajar sobre una tarea es compleja porque es casi inevitable que se olvide considerar una o dos cosas. Una checklist ayuda a centrarse en las partes difíciles de una tarea al quitarle de la cabeza las cosas triviales. Con lo cual no hay que esforzarse por recordar todas las cosas triviales; solo hay que consultar la lista de verificación en varios puntos de pausa
Es importante comprender que las listas de verificación están pensadas para facilitar, apoyar y liberar a los profesionales. No están ahí para supervisar ni auditar. El poder de estas reside en que se utilizan en la situación, no en que dejen rastro alguno. Quizás las listas más poderosas son aquellas que específicamente no dejan ningún rastro de auditoría. Estas podrían ser simplemente listas en un póster en la pared, un portapapeles, una carpeta de anillas o similar.
Una checklist es solo una ayuda para la memoria. No existe para limitarte, sino para ayudarte a recordar realizar tareas triviales.
Una checklist no es un complejo como diagrama de flujo con instrucciones detalladas. Es una simple lista de elementos que puedes repasar en unos minutos.
Las listas de verificación pueden ser de dos tipos: leer-hacer y hacer-confirmar. Con una lista de verificación leer-hacer, se lee cada elemento de la lista y se realiza inmediatamente la acción antes de pasar al siguiente elemento. Con una lista de verificación hacer-confirmar, se realizan todas las tareas y, a continuación, se revisa la lista de verificación y se confirma que se han realizado todas las actividades.